Extremismo y exterminio
Ese método del Exterminio ha funcionado al extremismo para fulminar toda su disidencia interna. Ha logrado colocar a un candidato presidencial incapaz de debatir, incapaz de proponer, y quien recurre a la vocería de la persona más extremista de todas, que ha acumulado méritos para ser inhabilitada y posiblemente juzgada, por haber contratado laboratorios que liquidan a su disidencia política. Si usted ha caído en la trampa de los laboratorios del extremismo y se inhibe de emitir opiniones propias, o si usted tiene miedo al que dirán, impuesto por la Venezuela decente que todo lo critica y nada aporta porque es incapaz de sustentar, entonces usted debe calladamente admitir que el extremismo no será solución ni para usted ni para Venezuela. Si usted está rodeado de otras personas víctimas del extremismo y no tiene mucha energía, sígales inicialmente la corriente y en su interior intente encontrar narrativas que destruyan al extremismo. Cuando ya esté preparado a defender y zafarse de los ataques injustos que le propicia el enemigo extremista, llega el momento de contraatacar. Si usted únicamente recibe insultos es una buena señal, porque eso significa que sus ideas no están siendo refutadas. Posiblemente sus ideas son relevantes: utilice su criterio propio y establezca alianzas con personas que también hayan sido víctimas del extremismo y estén en proceso de atrincheramiento.
Durante las próximas semanas el extremismo se sentirá acorralado, ya que ha sido financiado por enormes sumas de dinero que exigen un retorno a su inversión mediante la imposición de una presidencia de la República extremista en Venezuela. Quedarían al traste legítimas aspiraciones de la ciudadanía de vivir en paz armonía, sometidos en un ambiente libre de bullying. Aún cuando usted no eligió esta guerra, ya el extremismo lo ha identificado a usted como enemigo, y ya le está lanzando ataques y chantajes. De modo que debe defenderse y contraatacar. Los argumentos son potentes y deben seguir siendo utilizados, aún cuando inicialmente reciba insultos como respuesta, llegará un momento en que sus argumentos penetrarán la coraza de insultos que le proporciona el extremismo. Allí daremos inicio a la destrucción y aniquilación del extremismo. Recuerde que el extremismo intenta destruirlo a usted. En esta batalla campal si usted desea sobrevivir debe destruir al extremismo. En el ámbito de las campañas idales estaremos hablando de un frente común del extremismo, liderado por su candidato presidencial Edmundo González Urrutia, quien desde las sombras es utilizado para imponer una agenda extremista, contra todas las candidaturas democráticas de la oposición venezolana y el autoritarismo del régimen saliente.
Estando claros que es indispensable salir del gobierno de Nicolás Maduro, caemos en cuenta que también es necesario salir de la oposición extremista representada por los intereses que manejan a Edmundo González. Emerge claramente la posición de Antonio Ecarri cuya propuesta de debate presidencial desnuda las intenciones ocultistas a las cuales tradicionalmente recurre el extremismo. Es significativo que el candidato Nicolás Maduro preliminarmente acepta la propuesta de Antonio Ecarri a debatir en público, según cómo se mueva Antonio Ecarri. Si los movimientos de Antonio Ecarri continúan posicionando su opción como una derecha pensante y responsable, que comparte junto a la izquierda el reto de derrotar al extremismo, el candidato Maduro pudiera acceder al debate, aún cuando muchas personas no lo puedan creer. En caso que los candidatos Nicolás Maduro y Antonio Ecarri debatan se habrá definido la nueva polarización, tras la despolarización que hemos ido observando durante los últimos meses. Sería el candidato de gobierno Nicolás Maduro debatiendo contra el candidato de la oposición Antonio Ecarri, quien presentará propuestas programáticas de educación, salud, electricidad y economía. La candidatura de Edmundo González Urrutia, tan enfocada en posicionar mensajes de odio contra todo aquel que decida no votar por esa opción, se verá debilitada.
El objetivo es bajar el nivel de aceptación de la candidatura extremista de Edmundo González al tercer lugar, o quizás al cuarto. Es necesario que la derrota del extremismo sea contundente para que los responsables de los laboratorios de acoso, insulto y odio no reciban más apoyo desde la comunidad internacional, y logren enfrentar cargos emanados desde la justicia venezolana por habernos enemistado a los venezolanos. Una vez logremos depurar a la política venezolana de los factores extremistas, podamos emprender el ansiado proceso de reconciliación y amnistía que exigimos los venezolanos para convivir pacíficamente en un planeta compartido con nuestros hermanos americanos, europeos, africanos, asiáticos, y de Oceanía. Venezuela merece retornar por la puerta grande al Gran concierto del mundo civilizado, como puente entre el Oriente que nos lega el régimen actual con el occidente que busca ser reconquistado por un nuevo presidente electo Antonio Ecarri. El extremismo dispondrá de largos años de irrelevancia que quizás lo motiven al arrepentimiento y a una búsqueda por educación, para aprender a convivir según los nuevos tiempos de un modo que las antiguas estructuras de la Venezuela decente que decían emular nunca les ofrecieron.
Transmitimos todo el ánimo posible a quienes se sientan víctimas del extremismo, del acoso y del bullying. Recuerden que no están solos y que sólo necesitan algunos días para diseñar su propia estrategia individualizada de contraatacar a quienes debieran de ser nuestros hermanos y compatriotas venezolanos, y realmente se comportan como enemigos. Buscan exterminarnos. La lógica es potente y sobrevive al cansancio que experimentan los extremistas cuando sus insultos carecen de eficacia luego de haber sido repetitivos. Durante las próximas semanas es previsible que una vez visitados todos los rincones de Venezuela, los recorridos turísticos de la vocera del extremismo pierdan eficacia dado que empezará una campaña presidencial, y será necesario que a la misma acuda el verdadero candidato del extremismo, quien está en una tarjeta y quien deberá debatir con los demás candidatos presidenciales. Si desea mantenerse con opción para llegar a la presidencia de la República de Venezuela, quizás él sea un hombre honorable pero entran los intereses del extremismo.Por consiguiente no podemos permitir que su candidatura prospere y hay que llevarlo al tercer lugar de inmediato.