Escándalo planetario por USAID
Escándalo planetario de USAid se expande en la opinión pública internacional, horrorizada como un programa que debía apoyar el desarrollo económico internacional, no ha funcionado para nada. En Venezuela hay médicos que viven en zonas rurales que nunca lograron ser beneficiarios de esa ayuda para desarrollar sus pequeñas clínicas en sus pueblos rurales. Cualquier cantidad de iniciativas educativas fantásticas, que pudiesen haber sido gestionadas por profesores que hoy en día ganan míseros salarios, nunca recibieron tal financiamiento. Tantas otras oportunidades de emprendimiento profesional que pudiesen liderar personas útiles, residentes en países a los cuales llegaba esa ayuda del desarrollo internacional de USAid, nunca fueron consideradas. Se han observado los beneficiarios a través de su número de identificación de empleador, y los montos que recibieron. Es atroz la cantidad de corrupción y de beneficiarios que claramente no utilizaron esos recursos para el fin para el cual estaban destinados. Será necesario generar, tanto en los Estados Unidos como en muchos países afectados, reclamos legales que exijan castigo a los corruptos y resarcimiento de daños a los verdaderos beneficiarios.
En el caso de Venezuela, la ayuda humanitaria durante 2024 distribuida por USAid ascendió a 321 millones de dólares, de los cuales ningún venezolano residente en Venezuela ha visto un solo céntimo. Llama la atención que las personas que defienden a USAid, suelen estar indirectamente involucradas en dichos desfalcos, ya que es inexplicable que no estén sumándose al repudio mundial por este gigantesco foco de corrupción internacional. Empresas del sector mediático y periodístico, sector en declive ya que la gente prefiere estar informada a través de páginas web y podcasts, recibían apoyos multimillonarios de USAid para posicionar narrativas de extrema izquierda, opuestas al libre mercado, y acostumbradas a mantener a un funcionariado inútil, corrupto y despilfarrador de recursos. Dicho ruin funcionariado devengaba sueldos astronómicos mientras que las personas que realmente trabajamos con las uñas en países como Venezuela. estamos prácticamente en la indigencia debido a la falta de oportunidades económicas, generadas por el sistema de gobierno corrupto y socialista.
La oposición en Venezuela representada por el gobierno interino, presidido por una asamblea nacional que no sólo tenía la fracción de la Mesa de la Unidad Democrática sino también la fracción 16 de Julio, a la cual pertenecen los partidos políticos Alianza al Bravo Pueblo y Vente Venezuela, todos ellos han recibido fondos del USAid para sueldos y salarios de diputados, la mayoría de los cuales disfrutan suntuosos estilos de vida en los más apetecibles destinos de la comunidad internacional. Es posible que programas del régimen de Nicolás Maduro también hayan sido beneficiados con dineros del USAid, ya que en muchas ocasiones la distribución de dichos recursos se hacía con total opacidad. Las células residentes en Estados Unidos siempre han tenido acceso al funcionariado del Gobierno Federal, que de una manera muy opaca, e irrespetando los lineamientos emanados por el Departamento de Estado, han asignado recursos a programas que no tienen sentido de desarrollo, sino que tienen motivos tan superfluos como: clases para no quemar basura en Vietnam o desfiles de sexodiversidad en Uganda. Los verdaderos problemas de salud, educación idiomática, matemática y tecnológica e infraestructura por lo general se ofrecían a sobreprecio, y de una calidad inferior a lo proporcionado por iniciativas gubernamentales auditadas o por el sector privado.
Elon Musk ha advertido que vienen en camino auditorías para dos gigantescos focos de despilfarro de dinero: como son Medicaid y Medicare, y en breve destaparemos los oscuros destinatarios de gastos gubernamentales federales por seguridad social para veteranos, y personas de la tercera edad, o el destino de los fondos de jubilación administrados por el gobierno. Sospechamos que muchas empresas farmacéuticas e industriales promueven un estilo de vida enfermizo, que recurre al uso permanente de servicios médicos para poder seguir facturando. Tales serán probablemente los escándalos a los cuales debemos prepararnos para escuchar durante los próximos días. Como era previsible la izquierda internacional deplora el hermoso proyecto de Donald Trump, de convertir a la Riviera de Gaza en un hermoso centro internacional de esparcimiento, y entendimiento intercultural e interreligioso. Se aferran al anacronismo de las soberanías Nacionales con el caso de Venezuela, en donde estamos calándonos a un abominable régimen usurpador e ilegítimo, que pretende tomar decisiones por nosotros, y que utiliza nuestro petróleo, nuestras minas y nuestro espacio aéreo como le da la gana. A los venezolanos nos somete.
Ya hemos trascendido el concepto de soberanía nacional. Somos muchos los venezolanos a quienes no nos importaría formar parte de otro país, si ese otro país nos proporciona la seguridad económica, jurídica y electoral que carecemos en nuestra tierra. Eso mismo ocurrirá en Gaza, aún cuando inicialmente el rey de Arabia Saudita tenga que decir por presiones de raza y etnicidad arábiga que no estará de acuerdo con Israel. Ahora el tema es que no será Israel sino serán los Estados Unidos quienes administrarán Gaza, y la convertirán en el hermoso lugar que ni Israel ni Palestina pudieron nunca lograr. Los conceptos de nación estado deben irse erradicando paulatinamente. Son únicamente defendidos por organizaciones anacrónicas como las Naciones Unidas u organización de Estados Americanos, que nuevamente como hemos visto tantos años durante nuestras luchas por Venezuela no sirven para absolutamente nada. Manejan partidas de recursos que son despilfarrados. Apoyaremos la liberación de Gaza del subdesarrollo y las ruinas. Anunciaremos a todos aquellos que todavía pretenden escudarse en soberanías nacionales, que generan pobreza a los residentes y riqueza a los gobernantes, transición hacia un sistema internacional de disfrute de las tierras de Gaza: para todo el Medio oriente y turistas del resto del planeta.
Los países árabes tendrán que recibir a la población de Gaza del mismo modo como los países de Europa han recibido a los sirios, o como los países de América han recibido a los venezolanos. Se diseñarán incentivos para que se creen comunidades seguras de repatriados palestinos, quienes posiblemente tendrán que optar por alguna otra nacionalidad: ya que aún cuando la izquierda hizo sus mejores esfuerzos por promover la creación de un estado palestino, dicho estado palestino es inviable. En el caso de Venezuela sólo ha servido para coadyuvar a la permanencia del régimen neotoalitario, ilegítimo y dictatorial de Nicolás Maduro. La aspiración de los venezolanos descendientes de la cultura judeocristiana es restablecer nuestras relaciones diplomáticas con el estado de Israel.
En la coyuntura local de Venezuela sigue la bochornosa actitud de Manuel Rosales y las cúpulas de un Nuevo Tiempo: un partido nacional con sede en Caracas, que por algún motivo dedica demasiados recursos y esfuerzos al Estado Zulia, que es apenas una de 24 entidades federales. Promueven allí la reelección de un gobernador que se dice ser de oposición, pero quien no colaboró activamente en la cobranza del triunfo electoral de Edmundo González Urrutia. Por consiguiente no tiene autoridad moral para exigir a los electores que lo apoyemos a él, y que defendamos votos para él, cuando él nunca estuvo interesado en defender los votos para el presidente de la república. El gobernador del estado Zulia en búsqueda de reelección no tiene proyectos sociales para su estado. Lo único que busca es la continuidad de un proyecto personal, que le permita a su familia acceder a recursos económicos de la gobernación del estado Zulia, de modo similar como los corruptos beneficiarios del USAid se han lucrado. Durante los próximos años los ciudadanos trabajadores y honrados de la comunidad internacional, y de los Estados Unidos nos abocaremos a promover el libre mercado, y a denunciar las corrupciones administrativas que han generado las distorsiones en uso de fondos públicos. Ello prueba que el actual sistema internacional es inviable y despilfarrador: premia a los flojos, castiga a los laboriosos.
Es loable la negativa del secretario de estado Marco Rubio a asistir a la cumbre del Grupo de los 20 que se celebrará en Sudáfrica. Como sabemos Sudáfrica es un país hostil a sus minorías étnicas de raza blanca. All´í se promueven agendas comunistas y desestabilizadoras, que incitan a la impunidad del terrorismo Internacional. Recordemos como Sudáfrica durante el año pasado generó un caso en la Corte Penal Internacional en contra de Israel, para poder defender a los terroristas y asesinos de Hamás. Utilizaban escudos humanos: muchas veces mujeres y niños en escuelas y hospitales, para tapar artillería de guerra y misiles en los túneles de Gaza. La reconstrucción de Gaza será muy compleja: hay que eliminar bombas que pudiesen detonar en cualquier parte. Existen edificios en ruinas que pueden caer en cualquier momento. Es un lugar que está completamente destruido y que no ofrece las condiciones mínimas de habitabilidad. Es necesario deportar a su población a países que los puedan recibir, en comunidades que deberán ser construidas, y así limpiar el terreno para la nueva Riviera del Medio Oriente en las paradisíacas playas de Gaza: serán ofertadas como destino turístico de primer orden a beneficio de la comunidad internacional.
Sudáfrica pensaba que su alianza con Rusia, China, la India y Brasil tendría éxito. Hasta la fecha no hemos visto avances significativos en los BRICS, más allá que una inclusión de miembros nuevos cuyas monedas nacionales más bien se han devaluado en contra del dólar. La tendencia alcista del dólar se mantendrá a medida que se sigan desmantelando focos de corrupción administrativa en los Estados Unidos, se logre bajar el déficit fiscal, y ya no sea necesario imprimir dinero inorgánico, que fue la razón principal por la cual los BRICS parecían estar tomando auge recientemente. El trabajo que está efectuando Marco Rubio como secretario de estado es excelente. Su única falla es heredada de sus raíces familiares, que le han inculcado una total ausencia de diálogo con regímenes con quienes no desea hablar. Él está consciente de ello, pues lo dijo en una entrevista. Pero le falta aprender más respecto a cómo negociar con tu enemigo. Afortunadamente Donald Trump ha tomado nota de ello y ha designado a Richard Grenell como su enviado en Venezuela, Corea del Norte, posiblemente Cuba y otros países en los cuales Marco Rubio no será eficaz.
Marco Rubio no sería un interlocutor ante Venezuela ya que generaría una oposición muy frontal del régimen, tal como pudimos observar con una airosa carta escrita por Yván Gil. El estilo pragmático de Richard Grenell es el adecuado para las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela, ya que el régimen de Trump busca cohabitar con nosotros, con nuestra industria petrolera y con nuestro fallido sistema electoral: que no sirve y que sólo adjudica a las mismas personas. Ello es preferible a que se nos suspenda el chorro petrolero. Quienes vivimos en Venezuela tendríamos que calarnos nuevamente una emergencia económica y humanitaria sin precedentes. Más bien estamos intentando aprovechar el escaso desarrollo y progreso económico que pudimos observar durante el año pasado, de modo que este nuevo sistema de responsabilidades compartidas entre Richard Grenell y Marco Rubio para la secretaría de estado formal, y las relaciones con países difíciles está funcionando. Donald Trump siempre tiene buenas ideas: su solución para Gaza inicialmente no está gustando a una comunidad internacional acostumbrada a pensar según cánones predecibles. Aún quedan muchos meses y años por delante, para continuar la estupenda gesta geopolítica libertaria que promete Donald Trump, a beneficio de una comunidad internacional obsoleta.