En espera de actas y escrutinios (2)
Los resultados pronunciados por Elvis Amoroso provienen de una totalización a la cual no fue admitida la presencia de testigos. Por consiguiente no hay ninguna garantía que dichos resultados provengan del totalizador. Al no haberse cumplido los procedimientos previamente acordados para suministrar los resultados, el boletín número uno carece de validez y no puede ser reconocido por los candidatos Antonio Ecarri, Javier Bertucci, Claudio Fermín, Enrique Márquez y Edmundo González. Cualquier acuerdo firmado para reconocer los resultados electorales es irrito y carece de validez, ya que no existe ninguna garantía de sumatoria de votos escrutados en todas las mesas y centros de Venezuela. Tampoco ha sido publicada la lista centro por centro, mesa por mesa, parroquia por parroquia, y estado por estado, de quién es el presidente electo adjudicado en cada una de esas mesas. Durante la gestión reciente de Tibisay Lucena, cuando se efectuaron elecciones entre Henrique Capriles y Nicolás Maduro, pocas horas después de ser anunciado el primer boletín en la página web del CNE era posible colocar cualquier estado, municipio, parroquia, centro de votación, o Mesa de votación. Se efectuaba una totalización específica para ese campo.
La página del CNE durante la gestión de Tibisay Lucena funcionaba de modo similar que cualquier buscador informático de primera línea. Así por ejemplo, aparecía Henrique Capriles adjudicado en la presidencia de la República, en alguna de las mesas del Colegio San Agustín de El marqués y aparecía Nicolás Maduro adjudicado en alguna mesa del colegio República del Ecuador en San Juan. Por ejemplo salía Henrique Capriles adjudicado en la totalidad del Estado Miranda y salía Nicolás Maduro adjudicado en la totalidad del estado Portuguesa. Ése es el tipo de resultados que se esperaba que estuvieran disponibles para poder ser reconocidos. Cuando un candidato o un elector están acostumbrados a que el Consejo Nacional Electoral solía trabajar con eficiencia, dichos resultados se pueden reconocer casi que de modo automático. Pero en esta oportunidad no existe un desglose de resultados mesa por mesa. Y por consiguiente no existe ninguna garantía que la información leída por Elvis Amoroso sea verídica. No hay necesidad que los candidatos reconozcan esos resultados, ya que no son resultados sino cualquier otra cosa. En Venezuela no tenemos un presidente electo, sin embargo existen numerosas sospechas que las elecciones pudiesen haber sido ganadas por el candidato Edmundo González Urrutia, cuyo comando ha suministrado una totalización paralela mesa por mesa que arroja su victoria por aproximadamente 35 por de diferencia.
Maduro requeriría 3.893.950 votos adicionales para ganar, faltando 5642 mesas por transmitir. Se Requieren 691 votos para Maduro en promedio por cada mesa faltante. Promedio actual es apenas 132 votos para Maduro por mesa transmitida. Diferencia a favor de Edmundo es irremontable
Aún cuando durante la tarde se apreció abstención o mesas y colegios vacíos, también cabe destacar que la calidad de las máquinas de votación ha mejorado en comparación a procesos electorales anteriores. La gente podía votar más rápido durante la mañana, muchos centros de votación aparecían muy llenos porque algunas máquinas debían ser reiniciadas, lo cual alarga la cola. Al haber comenzado las votaciones durante la madrugada, más temprano que de costumbre, ya al final de la mañana habían sufragado casi todos los electores y sólo concurrieron algunos en la tarde. Fue significativo que la operación remate en esta oportunidad no se efectuó. No hubo afluencia de votantes del oficialismo durante la tarde. Reportes anecdóticos de muchos centros electorales en todo el país sugieren que el candidato de oposición ganaba las elecciones en centros electorales donde siempre había ganado el chavismo. Aún cuando los candidatos presidenciales en sus discursos de rechazo a los resultados sugieren que el CNE presente resultados desglosados mesa por mesa, es poco probable que el CNE de Elvis Amoroso proporcione dicha totalización mesa por mesa, y publique los resultados en la página web, tal como sí lo hacía Tibisay Lucena. Con un alto grado de probabilidad esos resultados reales de ser publicados confirmarían que dichas elecciones las ganó Edmundo González.
Es significativo que Nicolás Maduro nunca ha ganado elecciones de manera abrumadora. Cuando Henrique Capriles la diferencia de votos fue muy estrecha, pero sí se le reconoció su victoria ya que desde el primer momento estuvieron disponibles los resultados mesa por mesa. Esa situación no ocurrirá ahora. Es risible que se pretendan convocar nuevas elecciones de proyectos comunitarios con el CNE. Con esta metodología cuestionable de totalización para el mes de agosto, cuando el CNE claramente no está en capacidad de asumir sus funciones como los venezolanos hasta muy recientemente estábamos acostumbrados a disfrutar. Los venezolanos queremos recuperar el sistema electoral, que en la actualidad es está siendo seriamente cuestionado por las observaciones internacionales presentes en Venezuela, especialmente el centro Carter, quienes han constatado irregularidades que ya han sido descritas en comunicados a la opinión pública. Se acerca el momento en que los resultados de estas elecciones no lleguen a considerarse válidos por la mayor parte de la comunidad internacional. Ciertamente Rusia y China son países importantes, sin embargo su reconocimiento de los resultados electorales en Venezuela es prematuro, y probablemente obedezca a razones de geopolítica ya que se está intentando colocar a Venezuela como un peón de la ajedrez mundial en una lucha entre las grandes potencias.Una gran cantidad del planeta considera que el presidente electo es Edmundo González Urrutia, y en este caso no estaríamos hablando de un gobierno interino estaríamos hablando de un gobierno legítimamente electo.