Dos juramentaciones simultáneas buscan audiencia
La usurpación intenta juramentarse el diez de enero con fiestas populares y actividades circenses, para derrotar a lo que ellos denominan fascismo. Legitimidad también será juramentada en territorio nacional con el acompañamiento de Andrés Pastrana, expresidentes del grupo Idea y quizás algunos presidentes en ejercicio. Dispondremos el 10 de enero de dos juramentaciones simultáneas, y cada quien será libre de acudir o apoyar la que más le parezca. Es probable que la juramentación de la usurpación sea un acto escueto en el cual a última hora, quienes son arriados por miedo o por coerción a apoyar a la usurpación, pudiesen desertar y a último momento decantarse por la juramentación de la legitimidad.
Edmundo González Urrutia pudiese ser juramentado en Venezuela por el Tribunal Supremo de Justicia en el exilio, que para esta oportunidad regresará a territorio nacional no solo para juramentar a Edmundo González Urrutia, sino también para legislar la reinstitucionalización de Venezuela. Tendremos así un escenario donde dos juramentaciones simultáneas en territorio nacional competirán para un mayor número de seguidores, visitas, dignatarios convocados y demás métricas decisivas para que la comunidad internacional pueda decidir dónde está la legitimidad.
La usurpación continúa apresando a dirigentes políticos y mediáticos. Posiblemente tengan un listado de activistas, personalidades y dirigentes que progresivamente van apresando, puesto que al régimen no le importa seguir apresando gente. Los rehenes o fichas de cambio son utilizados por la usurpación para acceder a mejores condiciones de negociación. Esta fatídica táctica ha funcionado con el gobierno de Joe Biden, pero posiblemente ya no funcione más con el gobierno de Donald Trump ni con el de Javier Milei, ya que la línea dura presionará más al régimen, a pesar de todas las fichas de cambio que ofrezca como zanahoria.
Los ciudadanos seguimos a la espera de cuál de las dos juramentaciones simultáneas que ocurrirán en Venezuela sea la decisiva. Padecemos un horroroso fin de año inflacionario, con alta devaluación diaria del bolívar, cierre de cuentas fiscales y administrativas de fin de año utilizando una serie de tasas de cambio, tanto paralelas como oficiales, de meses anteriores del mes en curso, en transacciones de diferentes fechas que arrojan cuantiosas pérdidas. Ninguna previsión que se hizo a principio de año logró cumplirse satisfactoriamente, dada esta brusca devaluación luego de meses de relativa calma cambiaria.
El manejo económico de este régimen ha sido atroz, siempre lo hemos dicho. Así fuese por esa única razón, a quienes no les importan los derechos humanos, y a quienes no les importa el dolor ajeno, al menos pudiesen comprender que con este equipo económico y político es imposible lograr el desarrollo de Venezuela. ya que cada año financieramente resulta peor que el año anterior. Es aterrador observar como funcionarios del régimen, orondos advierten que seguirán en sus cargos y en sus funciones durante el próximo año. Del mismo modo los alacranes están persuadidos que Nicolás Maduro debe seguir en el poder, o de lo contrario habría una guerra civil.
Existen sectores de oposición ultra radical que desmejoran todos los esfuerzos del equipo de Edmundo González Urrutia y María Corina Machado. Se burlan de nuestras luchas, dicen que todo lo que efectuamos es una misión imposible de mentiras a la ciudadanía, y que existirá gran decepción. La ciudadanía sabe perfectamente que esto es difícil, que siempre existe una probabilidad de derrota. Existe la convicción que dichas probabilidades cada vez se alejan más de la usurpación y se acercan más a la legitimidad. El nuevo desarrollo del tribunal supremo de Justicia, dispuesto a acompañar a Edmundo a Venezuela, es una excelente noticia ya que aclara el panorama incierto de qué hubiese pasado si la asamblea en el exilio no hubiese podido regresar.
Al regresar tanto el presidente electo como los magistrados de la Corte Suprema de Justicia en el exilio, junto con la proclamación por el CNE representado por el rector Delpino, tenemos cubiertas las necesidades legales para que la actividad de juramentación de Edmundo González Urrutia como presidente de la república el 10 de enero, o quizás algunos días después, sea todo un hecho. Maduro si lo desea podrá efectuar un acto local, circunscrito a las parroquias Catedral y Altagracia en la ciudad capital.
El acto de Edmundo causará sensación a lo largo del resto de las comunidades nacional e internacional. Ha desertado de la Embajada Argentina el rehén Mottola, quien ha expresado desavenencias políticas con Claudia Macera, Magalli Meda, Omar González y Pedro Urruchurtu, o simplemente desea tener acceso a agua, alimentos y demás comodidades que brinda la vida en libertad y sin acoso. Mottola ha sido interrogado por el Ministerio Público y se encuentra en su residencia bajo arresto domiciliario, mientras los demás rehenes permanecen en las instalaciones de la Embajada Argentina. Allí producen los contenidos necesarios que recorren la comunidad internacional, informando al mundo las atrocidades del régimen. Exigen que las presidencias, congresos, diputaciones, organismos multilaterales y demás personalidades e instituciones adscritas a la comunidad internacional deploren al régimen y se unan a la causa de Edmundo González Urrutia.
Es interesante observar como la base de la usurpación ya toma como un dogma de fe la perpetuidad del régimen, y siguen criticando a quienes ganamos como fascistas de derecha. Por esos dos únicos motivos no desean permitir que nuestra opción llegue al poder, a pesar de haber acumulado la mayoría de votaciones. Las personas que participan en elecciones para efectuar actividades proselitistas intrascendentes, pero que luego esperan ser adjudicadas y son incapaces de reconocer el triunfo de quien obtuvo más votos, es gente que no es demócrata y que serán nuestros adversarios políticos, a ser siempre derrotados. Necesitarán ofrecer excesivas dosis de arrepentimiento antes que las grandes mayorías les podamos permitir que puedan utilizar nuestros espacios políticos.
Los adeptos al oficialismo no desean que Edmundo González Urrutia se juramente en territorio nacional porque destruiría los planes oficialistas de perpetuarse de modo usurpacionista en el poder. Además se expondrían irregularidades administrativas que deberán ser juzgadas por el nuevo sistema jurídico que nacerá, gracias a los desarrollos legales que tenga a bien promover el Tribunal Supremo de Justicia en el exilio, que pronto estará en territorio nacional y para beneficio de la comunidad nacional. Edmundo González Urrutia llegaría a juramentarse exitosamente en Venezuela, pondría en ridículo a una juramentación de la usurpacion con escaso acompañamiento. Quizás el paso siguiente sea su desplome y fallecimiento natural, sin necesidad de un excesivo uso de la fuerza. También pudiese ocurrir que el régimen logre mantener momentáneamente algunos apoyos de fuerza, y sea necesario un combate directo entre las comitivas de la usurpación, contra las comitivas de la legitimidad.
Es necesario para la jerarquía de la usurpación entregarse, o abandonar el país antes del diez de enero como parte de la negociación a la cual reiteradamente nos hemos referido. Ésa sería su mejor opción. De haber dos juramentaciones, la convocatoria oficial será tan poco nutrida que su inferioridad numérica servirá como detonante para que las Fuerzas Armadas apoyen conclusivamente a la juramentación legítima, y se proceda a capturar a la usurpación, por no permitir al presidente electo que pronto será presidente en ejercicio asumir sus funciones.
Caerían en cascada la Asamblea Nacional ilegítima del 2020 y el Tribunal Supremo de Justicia ilegítimo de la señora Carlysa Rodríguez. También caería la presidencia del Consejo Nacional electoral de Elvis Amoroso, organismo que debería ser reinstitucionalizado a toda carrera por Juan Carlos Delpino quien posiblemente deba organizar en un lapso relativamente breve, ya sea una asamblea nacional Constituyente o elecciones regionales, municipales y de diputados, siempre y cuando se pueda solucionar el padrón electoral. Muchos jóvenes que recién llegaron a la mayoría de edad no están incluidos. Muchos votantes en el exterior tampoco están incluidos.
El presidente en ejercicio Edmundo González Urrutia se abocaría a restaurar relaciones diplomáticas con una significativa cantidad de países, en los cuales existe diáspora venezolana y sin embargo carecemos de relaciones diplomáticas. Las empresas de navegación aérea también estarán interesadas en restaurar conectividad hacia el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, que sirve a la ciudad de Caracas con apetecibles destinos de la comunidad internacional, que tradicionalmente generan alta demanda de turismo negocios y encuentros familiares. Muchas de las rutas aéreas en la actualidad como la Habana, Estambul, Moscú, Argel quizás sean desincorporadas ya que Conviasa no será viable y posiblemente sufra una privatización similar a la de Aerolíneas Argentinas.
La motosierra de Javier Milei está causando sensación en Alemania, Japón y demás países desarrollados de la comunidad internacional, que desean emular a Argentina como ya lo ha hecho Estados Unidos. A través de Elon Musk se reducirán muchos ministerios. Edmundo González Urrutia posiblemente acceda una vez esté cómodamente instalado en el poder nacional, decidir cuáles ministerios deberán ser eliminados. La gran mayoría de los puestos públicos son innecesarios y redundantes. El estado casi no debería tener funciones más allá de la seguridad, relaciones internacionales, estado de derecho y vialidad.
Sistemas de salud y educación deberían desconcentrarse del poder nacional y ser asumidos por gobiernos municipales, más cercanos de los pacientes y más cercanos de los estudiantes. Vendrían ahorros a la nación, una vez sean despedidos funcionarios que suelen darse ínfulas de importancia mientras administran discrecionalmente recursos del país. Serían parte del pasado. Esperamos con ansiedad que la motosierra tan exitosa en Argentina, y tan deseada por países civilizados de la comunidad internacional, también llegue a Venezuela. Así se liberará personal que estará disponible para el sector privado.
Otro beneficio de contar con un tribunal supremo de justicia en el exilio reinstalado dentro de Venezuela será que podremos otorgar algo de paz a Karim Khan y su Corte Penal Internacional, quienes podrán descansar de tantas recusaciones y tanto acoso, por parte de tantos países indignados por su aperreamiento con el régimen de Maduro. Los venezolanos demostraremos que la Corte Penal Internacional fue accesoria: nunca sirvió para nada. Pudiera ser eliminada si suficientes países de la comunidad internacional llegan a la conclusión que la CPI es un organismo burocrático que chupa recursos, generados por los países miembros, y no produce resultados. La motosierra no sólo llegaría a los diferentes gobiernos de las diferentes comunidades nacionales, sino que también se aplicaría a organismos ineficientes e inoperantes de la comunidad internacional como la Corte Penal Internacional, que no sirve para nada.
El régimen de Nicolás Maduro aún planifica juramentarse en un acto irrelevante sin convocatoria, mientras la ciudadanía, los militares, los diplomáticos y hasta presidentes de otros países acudirán a algún lugar alternativo en Venezuela, que no necesariamente sea la sede física de la Asamblea Nacional actual, que presumimos será acordonada. La juramentación de Edmundo González Urrutia se desarrollaría con normalidad, tal como acontecía con las actividades de calle del expresidente interino Juan Guaidó. No será del agrado de los acólitos al régimen, quienes ansían mantener una supremacía perdida mientras se siguen desplomando en cámara lenta.
